Todos conocemos la fuerza de un olor y los recuerdos que nos evoca cuando volvemos a sentirlo. Así que, es importante que escojas una fragancia especial para tu boda.
Además de ser un toque imprescindible en la rutina de belleza de una novia, cada vez que vuelvas a usarlo te transportarás a ese bonito momento de tu vida.
El perfume de las flores de un ramo silvestre, el aroma afrutado de una exótica y majestuosa tarta de boda, el olor a cuero de unos sillones sin estrenar, la hierba recién cortada de un jardín plagado de mesas perfectamente colocadas, la cera de las velas que decoran cada una de ellas… y el olor único e inconfundible de la novia aproximándose al altar.
El gran día siempre viene precedido de una lista interminable de elecciones: el vestido, los zapatos, el ramo, el tocado, los invitados, el catering o el lugar del banquete; pero muchas veces se olvida incluir algo tan básico y tan necesario como es el aroma que llevará la novia el día de su boda. Un perfume que durará para siempre en la memoria del novio, de todos sus invitados y de ella.