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Elegir qué tipo de menú vas a querer en tu boda te llevará cierto tiempo, del mismo modo que te llevó horas y horas pensar en las invitaciones de boda, o encontrar las perfectas ideas originales para bodas.
Si solo te queda darle vueltas a los zapatos de novia y poco más, ponte a pensar ya en el tipo de menú que te gustaría servir en el banquete. Si eres vegetariana y tu pareja también lo es, ¿por qué no organizar un menú vegetariano?
¿Qué tipo de vegetariano eres?
Una persona vegetariana no come carne, pescado, marisco, caza ni embutidos, y sigue una dieta rica en cereales, legumbres, frutos secos, verduras y frutas, acompañada (o no) de huevos y derivados de la leche. Sin embargo, no todo el mundo es vegetariano al 100%. Existen varios tipos de vegetarianismo: el ovolactovegetariano, que puede comer lácteos y huevos, el lactovegetariano, que toma leche, y, por último, el vegano, que no consume ningún alimento derivado de animales.
¿Y los flexitarianos y seguidores del raw food?
El flexitariano es el vegetariano que, de vez en cuando, consume productos animales. Mientras que los partidarios del raw food son aquellos que practican una dieta crudívora: solo comen alimentos crudos, sin procesar, y no consumen productos animales.
¿Cuál es la mejor opción?
Sea cual sea tu elección, hoy en día existen muchas opciones para ofrecer un delicioso banquete de boda sin carne, pescado ni cualquier otro producto animal. Pero si no sabes por dónde empezar, seguro que en alguna de estas ideas encontrarás la inspiración que necesitas.
Tres buenos aliados. A la hora de confeccionar el menú y el aperitivo de la boda no olvides que tienes tres grandes aliados: la comida asiática (japonesa, china y tailandesa), la mejicana y el bufet.
La comida asiática nos regala muchas recetas vegetarianas: onigiri (arroz relleno), tempuras… Tantas, que puedes hacer una selección de los platos que más te gustan. ¡Tendrán un punto de exotismo que sorprenderá gratamente a todos los invitados!
¿Y los platos mejicanos? Acuérdate de sus enrollados de verduras, flor de izote, o de los maravillosos guacamoles. Existen muchas combinaciones para dar ese toque exótico a un banquete sin necesidad de comer productos animales.
El bufet. Elegir un bufet es otra buena opción, ya que ofrece más ventajas que un menú convencional. Se pueden poner platos muy diversos, de forma que los invitados coman solo lo que más les guste y puedan repetir tantas veces como quieran.
Pica pica gourmet. Decántate por un pica-pica o un primer plato con diversas texturas y sabores: así casi nadie notará que se trata de un menú vegetariano. Si además está elaborado con productos ecológicos y orgánicos, mejor que mejor. Puedes escoger entre mil y un caprichos: desde crudités con salsas y frutos secos hasta sopas frías (aguacate y coco o algún gazpacho), pasando por canapés, como bolitas de queso con piñones, guacamole, croquetas de tofu, hojas de parra rellenas de arroz, patés vegetales, brochetas, surtidos de canapés vegetales, tzatziki (salsa griega), olivadas, hummus y, si sois ovolactovegetarianos, una tabla de quesos… ¿Algo más? El jamón ibérico. Muchísimos vegetarianos hacen una excepción de vez en cuando con este alimento tan sano.
Primavera y otoño. Si tu boda es en primavera o verano, asegúrate de incluir en tus menús frutas de temporada. En los meses fríos, no te olvides de los ceviches de setas, la pasta o las verduras braseadas. ¡Tendrás el éxito asegurado!
Platos principales. Puedes escoger recetas más elaboradas y contundentes, como strogonoff de champiñones, risotto de setas, timbales de espinacas, suflés de queso, paellas vegetales, moussaka de verduras, tagine vegetal, lasañas o carpacho de verduras, pasta, quiches… Son solo algunos de los platos que van a gustar a todos. ¿Aún piensas que la comida vegetariana es aburrida?
Y de postre… Un postre vegetariano no tiene nada que envidiar al tradicional pastel de boda. Juega con el chocolate, las cremas y las frutas como ingrediente estrella de vuestros postres. Fondues de chocolates con brochetas de fruta, sorbetes, dulces japoneses, de soja o alubia roja, tarta Tatín, crema de papaya o una macedonia. ¿Un aliado más? Sí, el helado, que también puede ser de soja.
¿Difícil decidirse, verdad?