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Sin duda, uno de los momentos que no se olvida de una boda es el camino hacia el altar. Un instante lleno de emoción y en el que novios e invitados tienen los sentimientos a flor de piel.
Aquí dejamos algunas ideas:
Flores. Un clásico que nunca falla y es que, si hay una opción que ofrece múltiples posibilidades, son las flores. Existe una flor ideal para cada estilo, sólo tienes que encontrar cuál es el tuyo. Flores silvestres para bodas eco y rurales, en tonos rosas como las peonías o rosas para bodas románticas y delicadas. Deshójalas y espárcelas por el camino hacia el altar, en los lados o por todo el pasillo.
También puedes optar por poner jarrones con flores y marcar el camino y adaptar estos recipientes al estilo de boda, con tela de encaje por ejemplo si es una boda vintage o esparto si es una boda rústica.
Troncos. Siguiendo con la idea de las bodas rústicas o campestres, si te casas al aire libre, una muy buena idea es añadir troncos de árbol para marcar el camino. Se pueden decorar con telas o con jarrones de cristal o dejarlos al desnudo y disfrutar de su belleza natural.
Alfombras. Si quieres sentirte como en una película puedes decidirte por la alfombra roja. Sin embargo, con la personalización que existe hoy en día, cada vez son más las parejas que eligen alfombras de esparto, de césped o varias alfombras con forma de corazón por ejemplo.
Globos. Geniales para bodas en el exterior, los globos dan sensación de ligereza. Úsalos en blanco y aumentarás este efecto.
Velas, que iluminen tu camino al altar; darán un toque mágico y romántico. Combina con cualquier tipo de boda, ya que pueden ir en farolillos, estar en el suelo, ser grandes, pequeñas… y además, en verano ahuyentan a los mosquitos.
Antorchas. Perfectas para las bodas de verano en la playa, conseguirán un ambiente cálido y acogedor.